Un Café Por la Seguridad Vial con Guadalupe Peñúñuri y Edgardo Bolio
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Se encargan de la planeación en municipios como Hermosillo y Mérida y coinciden en que de Sonora a Yucatán, urge la seguridad vial.
Por Georgina Hidalgo Vivas
Concebir una ciudad a futuro, una que vaya más de lo que dura un gobierno cualquiera, ha sido el sueño de urbanistas y arquitectos, pero sobre todo de la sociedad civil que sufre a diario penosos traslados. Este sueño inspiró los IMPLANES, organismos municipales de planificadores y ciudadanos, que creen que la planeación no es un gasto sino una inversión que genera prosperidad.
Necesitamos esa visión a futuro de la ciudad que vaya más allá de los tres años de los gobiernos municipales –que son quienes tienen todas las facultades de planeación del territorio– y que se haga con participación ciudadana, dijo la arquitecta sonorense Guadalupe Peñúñuri, directora del Instituto Municipal de Planeación de Hermosillo (@ImplanHMO) en la serie 'Un café por la seguridad vial' de la Coalición Movilidad Segura.
Sin embargo, en un país como el nuestro es más fácil decirlo que hacerlo, pues planificar cualquier ciudad requiere de un trabajo complejo y diversas etapas: desde generar documentos técnicos de planeacion como los Programas de Desarrollo Urbano, hasta la capacidad de generar acuerdos. Actualmente, hay 60 Implanes en el país y una Asociación Nacional que los une en el objetivo de hacerlo sustentablemente y poniendo en el centro a las personas, pero la realidad es que apenas comenzamos a ver cambios lentos en la movilidad y la seguridad vial de algunas ciudades, aunque sólo en aquellas donde la voluntad política permitió los acuerdos y la coordinación.
Mérida, se buscan brazos y cerebros y una ley
Según el arquitecto yucateco Edgardo Bolio, director Implan Mérida, en La Ciudad Blanca "faltan brazos, piernas, músculos y cerebros para materializar esa visión a futuro".
"El gran reto es como pasar de las ideas a las acciones. El marco legislativo no es un poco ajeno pero es fundamental en el proceso de diseñar la ciudad. No basta saber a dónde vamos si no tenemos capacidades de negociación para implementar las acciones". Le puedo decir que en México hay ciudades con una planeación exquisita, pero la ejecución de la obra no hizo caso a nada de lo planeado y debe haber ley que obligue a eso".
El gran debate entre los planificadores mexicanos es hasta qué punto los Implanes deben entrar a implementar. "Hay que pasar de las ocurrencias a las concurrencias", añade la sonorense:
"Que estén perfectamete bien indicados en instrumentos de planeación, los controles legales a largo plazo, debe haber un instrumento legal que de atribuciones claras a cada quien y descentralice presupuestos".
Hermosillo, dictámenes de congruencia
Peñúñuri destacó el logro de los dictámenes de congruencia, una reforma que permitió a los Implanes de su entidad examinar toda construcción para ver si cumple con lo planificado.
"Eso nos facilita muchísimo el acercar los planes a la sociedad sin que nos metamos en construcción directamente", por lo que lo recomienda como una solución a la falta de conectores transversales que permitan la construcción colectiva.
En su experiencia, la futura #LeyMovilidadSegura debe tener tres característcas básicas: vision de planeación completa a futuro, voluntad política para llevalas a cabo y capacidad de hacer alianzas. "Se necesita la zanahoria de la visión a futuro y el garrote de una norma rígida que dé sanciones a quien no la cumpla, sino siempre habrá quien se salte la tranca".
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